NBA Playoffs: los momentos más importantes de la historia de los Playoffs

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NBA: 8 momentos que pasaron a la historia de los Playoffs

Los Playoffs de la NBA siempre se ha caracterizado por esos momentos que te hacen saltar del sofá, gritar en plena madrugada y despertar a quien tienes al lado, o de quedarte boquiabierto después de ver una jugada inesperada. Repasamos siete de ellos.

Por Miguel Arjona  |  30 Mayo 2023

Un año más, ya está aquí uno de los momentos más emocionantes del mundo del deporte, los Playoffs de la NBA.

Conscientes de lo emocionantes que son estas eliminatorias, hemos querido analizar 8 momentos históricos de la historia de los Playoffs de la NBA. Sabemos que nos dejamos muchos momentos épicos en el tintero, pero es que si metemos todos convertimos el artículo en una enciclopedia. Eso sí, no están incluidas las Finales de la NBA. Todo a su debido tiempo...

El robo de John Havlicek

Corría el año 1965, era la etapa de la NBA en blanco y negro, y se enfrentaban en las finales de la Conferencia Este frente a los Philadelphia 76ers de Wilt Chamberlain.

En el séptimo y definitivo partido de aquella serie de Playoffs, John Havlicek robó un pase de Hal Greer, uno de los líderes de los 76ers, a falta de cuatro segundos y con un punto por encima en el marcador. Los Celtics vencieron aquella eliminatoria, y consiguieron alzarse campeones ante Los Angeles Lakers, logrando su séptimo anillo consecutivo.

El robo de Larry Bird

Pero no dejamos de hablar de robos. Sería Larry Bird el que protagonizase otro de los momentos históricos de los Playoffs. Uno de los momentos más icónicos del alero de los Boston Celtics llegó en 1987 ante los Detroit Pistons.

En aquellos años, los Detroit Pistons eran conocidos como los bad boys de la NBA. Su modo de jugar era rudo y violento. Hasta tal punto que inventaron las conocidas Jordan Rules para parar precisamente a Michael Jordan. Estas no eran más que asestar un golpe (cuanto más aparatoso, mejor) a la mínima que este entrase a canasta. Pero esto es sobre Larry Bird.

Era el quinto partido de las finales de la Conferencia Este, Larry Bird robó un balón y asistió a su compañero Dennis Johnson para ganar un partido crucial y poder clasificarse para las Finales de la NBA ante su máximo rival: Los Ángeles Lakers.

Los 63 puntos de Jordan contra Boston

Antes de 'The Shot', Michael Jordan ya realizó una de las mejores exhibiciones de la historia de los Playoffs de la NBA. Para recordar este momento, hay que remontarse a la temporada 1985-86, cuando se estaba disputando el segundo partido de la primera ronda de los Playoffs.

Unos débiles Chicago Bulls se enfrentaban a unos Boston Celtics comandados por Larry Bird que a la postre se convertirían en campeones esa misma temporada. Michael Jordan desplegó todo su arsenal ofensivo ante la mirada atónita del equipo rival. Llegó a forzar la prórroga, pero fueron los Celtics quienes se hicieron con la sufrida victoria.

Pero este momento no solo es importante por esto, sino por una de las declaraciones que dictarían la carrera del escolta, cuando Larry Bird, al ser preguntado por la actuación de su rival dijo: "Creo que esta noche Dios se ha disfrazado de jugador de baloncesto".

Duelo de canastas sobre la bocina en Chicago

Regreso a Chicago para hablar del primero de los dos momentos que nos dejó la eliminatoria entre los Bulls y los Cavaliers de 2015, que a su vez, revivía una de las rivalidades de los últimos años: Derrick Rose contra LeBron James.

Era el tercer partido de aquella eliminatoria con empate en el marcador a falta de tres segundos y posesión para los Bulls. La jugada no salió como estaba planeada. Derrick Rose no era un buen tirador de triples. Pero los astros se alinearon.

Aquel triple puso por delante a Chicago ante unos Cavaliers mermados por lesiones y sanciones. Pero el equipo de Cleveland no había dicho la última palabra... Sería en el cuarto partido de la eliminatoria cuando LeBron James emularía la gesta que consiguió su rival.

Si los Cavaliers perdían aquel partido, la serie se pondría 3-1 a favor de los Chicago Bulls, y según la estadística, el 95% de los equipos que se sitúan con ese marcador a favor, se clasifican para la siguiente ronda -aunque hay excepciones recientes-.

Con empate en el marcador, y a falta de 1,5 segundos, LeBron James anotó una canasta que no solo sentenció aquel partido, sino que también dilapidó cualquier esperanza en los jugadores de los Chicago Bulls.

El tapón de Manu Ginóbili

También existen jugadas protagonizadas por jugadores no estadounidenses. El escolta Manu Ginóbili, exjugador de los San Antonio Spurs, fue uno de los jugadores más importantes para su equipo durante toda su etapa NBA. Incluso cuando algunos querían retirarlo antes de tiempo, como en 2017.

En aquella postseason, los Spurs se enfrentaron a Houston Rockets en las semifinales de la Conferencia Oeste. En el final del quinto partido, la posesión la tenía James Harden, y cuando se dispuso a lanzar el triple que empataría el partido, forzando así la prórroga, Manudona, como lo llaman sus compatriotas argentinos, taponó el tiro y consiguió una victoria importantísima para las aspiraciones de su equipo.

Damian Lillard, aficionado a hacer historia

Damian Lillard nunca ha ganado un anillo ni ha llegado a unas Finales, pero aun así su paso por los Playoffs nos ha dejado recuerdos inolvidables.

Uno de ellos tuvo lugar en 2014. En aquel entonces, los Portland Trail Blazers llevaban 14 años sin superar la primera ronda de los Playoffs. Aquel año se enfrentaban a los Houston Rockets de James Harden, el equipo que más parece haber sufrido en este artículo. Y fue en el sexto partido, cuando a falta de menos de un segundo y con una desventaja de dos puntos, anotó un triple que ya forma parte de la historia del baloncesto.

Su segundo recuerdo legendario tuvo lugar cinco años después. En 2019, Damian Lillard volvería a clasificar a su equipo para las semifinales anotando otro triple sobre la bocina. Esta vez la situación era menos dramática, pero su complejidad fue superior.

Desde más de 11 metros, y con Paul George, uno de los mejores defensores de toda la liga, punteando su lanzamiento, Damian Lillard conectó el triple, y volvió a entrar en las páginas de historia.

El partido más largo de la historia

Seguimos con los Blazers. En la siguiente ronda de 2019, y en concreto en el tercer partido de las semifinales de Conferencia con Denver Nuggets, en uno de los partidos más largos de la historia de la NBA, con un suceso que no sucedía en un partido oficial desde 1953: ¡cuatro prórrogas!

Fue un partido agónico para los aficionados de los dos equipos, aunque hubo jugadores que afirmaban "estar bien" a pesar de haber jugado más de una hora de encuentro. Estas palabras pertenecen a Nikola Jokic, el pívot serbio de Denver Nuggets, que disputó 65 minutos de encuentro (ningún jugador superior a 2,13 ha jugado más en un partido de baloncesto). Aunque seguro que habría estado mejor si su equipo hubiese ganado.

Del Play-In a las finales: la hazaña de Jimmy Butler y sus Heat

A punto de quedarse fuera de los Playoffs y teniendo que disputar dos partidos del Play-In, los de Spoelstra se postulaban como un pobre 8 seed más en la historia de esta competición. Enfrentándose a Milwaukee, uno de los mayores favoritos a ganarlo todo, la muerte parecía sentenciada y las series, un mero trámite.

No obstante, Jimmy Buttler tenía otros planes y promediando 37,6 puntos, 6 rebotes y casi 5 asistencias, miró de frente a los ojos de la muerte y le dijo: "not today". Los Heat consiguieron eliminar al conjunto de Giannis Antetokounmpo en 5 partidos únicamente y ahora, la guadaña debía segar las cabezas de la gran manzana.

Los Knicks de Nueva York se habían clasificado como quinto y una vez más, los de Miami partían como los 'underdogs'. Las estadísticas y los papeles no importan, lo único certero es el corazón que muestres en el campo y una vez más, Spoelstra y Butler lideraron a los de South Beach a su segunda final de conferencia consecutiva donde aguardaban unos hambrientos Celtics.

La campana volvía a sonar y esta vez a lo grande. Los Heat se llevaban los 3 primeros partidos a su casillero y el pase a las finales parecía clarividente pero desde Boston pensaron otra cosa. En lo que se convirtieron unas apasionadas series, los Celtics consiguieron ganar 3 partidos seguidos, convirtiéndose en el 4 equipo en la historia en remontar un 0-3 y forzar un séptimo partido. Finalmente la gesta no se completó y un imperial Jimmy enterró las esperanzas verdes para llevar a los Heat a sus segundas finales bajo su mandato, bautizando a su equipo como el segundo 8 seed de la historia en llegar a las finales (el primero: los Knicks del 98-99).

Los playoffs no se detienen, y tras los momentos icónicos y legendarios de las rondas eliminatorias llegan los de las finales de la NBA. Solo el destino nos contará qué hazañas nos quedan por ver y qué récords son superados, pero lo que está claro es que queremos disfrutar de todos y cada uno de ellos.

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