Los millennials ya no beben cerveza

Shutterstock

Los millennials le declaran la guerra a la cerveza (y la siguiente generación no quiere ni oír hablar de ella)

Los estudios al respecto apuntan hacia un cambio en el gusto de los jóvenes, que prefieren otras bebidas antes que la cerveza. En Estados Unidos la caída en ventas de las principales marcas cerveceras tiene en jaque a la industria del sector, que busca alternativas para atraer el producto a millennials y generación Z.

Por Guille Galindo  |  08 Agosto 2018

Nadie sabe por qué, no existe un motivo claro que lo explique, pero los millennials no solemos despertar muchas simpatías en el resto de la población. Si se confirma la tendencia de la que os vamos a hablar hoy, esta vez sí habría una razón de peso para odiarnos. Nos estamos cargando la cerveza, así de claro. Y no, no es que hayamos optado por beberla en vaso de tubo, que también, es que ya no la bebemos.

El Beer Institute ha puesto la voz de alarma. Según su estudio, a la hora de comprar o pedir una bebida alcohólica únicamente el 49,7% de las veces se elige cerveza. De primeras no parece un mal resultado, pero teniendo en cuenta que a mediados de los 90 el porcentaje era del 60,8%, podemos y debemos estar preocupados.

La cerveza sigue siendo la bebida por excelencia, aunque su consumo es menor entre los jóvenes.
La cerveza sigue siendo la bebida por excelencia, aunque su consumo es menor entre los jóvenes. Shutterstock

EEUU ya sufre las consecuencias

El informe, eso sí, se centra exclusivamente en Estados Unidos, lo que no quiere decir que los resultados no puedan extrapolarse al resto del mundo. De momento, en el país norteamericano la crisis del mercado cervecero es ya una realidad. En lo que llevamos de año, las ventas de las cervezas más tomadas en EEUU (Budweiser, Coors Light y Heineken) han caído de manera progresiva, así como la popularidad de muchas de ellas. Sin ir más lejos, Budweiser ya no aparece en el Top 3 de las cervezas favoritas entre los consumidores, algo que no sucedía desde la década de los 70.

En líneas generales, son tres los factores que explican estos drásticos cambios:

  • El gusto por el vino. La cerveza cede cada año más terreno al vino entre los millennials. La situación se agudiza en EEUU, donde la nueva moda es beber vino en lata.
  • La apuesta por cervezas artesanas. Las grandes marcas sufren las consecuencias de un mercado cervecero más poblado que nunca. Los millennials siguen bebiendo las cervezas tradicionales, pero optan a menudo por otras alternativas, no tienen la fidelidad a la marca de los más veteranos.
  • Una vida más sana. Aunque nos vendan lo contrario, los jóvenes de ahora están más concienciados en llevar una vida saludable que las generaciones anteriores. Fumar, tomar drogas o beber ya no te hace más especial. De hecho, las redes sociales han propiciado que nos cuidemos más para no dar una mala imagen al resto.

Un cúmulo de circunstancias que han provocado que el Grupo Goldman Sachs haya retirado la confianza en los mercados a dos compañías cerveceras importantes estadounidenses como son la Boston Beer Company y Constellation Brands, además de publicar una advertencia devastadora: invertir en cerveza podría no ser rentable.

Las latas de vino se han convertido en todo un éxito en EEUU entre los millennials.
Las latas de vino se han convertido en todo un éxito en EEUU entre los millennials. Underwood

La cerveza ya no engancha

Ya sabemos que la generación X, la de los millennials, no termina de conectar con el lúpulo. ¿Qué hay de la generación Z, la posmillennial? El panorama es todavía más desolador. Un estudio de Berenberg Research sostiene que los nacidos a partir de 1996-2000 son los primeros que prefieren otras bebidas, como el vino, el vodka o la ginebra, antes que la cerveza. Para obtener estos resultados, han preguntado a más de 6.000 jóvenes de entre 16 y 22 años. El cambio de tendencia es evidente, la cerveza ya no es la prioridad entre las nuevas generaciones. Y recordemos que el estudio está financiado por la institución financiera alemana Berenberg, es decir, que no es algo que afecte solo al otro lado del charco. Es una cuestión generacional.

La solución pasa por... ¿la marihuana?

"¿Y ahora qué?", os preguntaréis. Evidentemente, la industria cervecera no va a hundirse ni a desaparecer. La cerveza sigue siendo la bebida alcohólica más recurrente, y pasarán décadas hasta que eso pueda cambiar. No obstante, la preocupación entre las grandes empresas del sector es una realidad, y no es para menos. Algunas ya han empezado a moverse para buscar soluciones. A medio plazo, el principal objetivo es potenciar la cerveza sin alcohol. Así lo ha confirmado la compañía Anheuser-Busch InBev, distribuidora de Budweiser, que busca de esta forma hacer frente a las pérdidas.

Sin duda, los mejores hábitos de los nuevos consumidores han despertado un interés en la siempre denostada cerveza sin alcohol. Y si no les sale bien la jugada, la industria cervecera estadounidense tiene un as en la manga totalmente inesperado que podría revolucionar el mercado de las bebidas: la marihuana.

La industria cervecera tendrá que afrontar la nueva realidad si quiere seguir compitiendo en el mercado.
La industria cervecera tendrá que afrontar la nueva realidad si quiere seguir compitiendo en el mercado. Shutterstock

Aprovechando que el consumo de cannabis se está legalizando paulatinamente, las empresas están buscando la fórmula de integrar la planta entre sus productos. La séptima industria de cerveza más importante del mundo, la canadiense Molson Coors, ha sido la primera en lanzarse a crear una cerveza sin alcohol que contenga cannabis. Todavía en proceso, se espera que salga a la luz los próximos meses, y la acogida que tenga puede ser clave para que otras den el paso.

De momento, Constellation Brands, una de las dos empresas señaladas por el Grupo Goldman Sachs, se ha hecho con el 9,9% de las acciones de una productora de marihuana canadiense. La principal estrella de Constellation Brands (solo en EEUU) es Corona. ¿Veremos en un futuro una cerveza con tequila y marihuana? Parece que con tal de conquistar a los millennials y a la generación Z, están dispuestos a hacer lo que sea.

Artículos recomendados