David Broncano: la fórmula del éxito para millennials

El Terrat

David Broncano y la fórmula del éxito millennial

Apenas conocido hace unos años, David Broncano se ha convertido en uno de los cómicos y presentadores del momento, y casi sin pisar la televisión en abierto. ¿Qué tiene Broncano para haber llegado tan alto? En la época de las redes sociales, analizamos los motivos que han convertido a este joven en el prototipo de cómico viral.

Por Guille Galindo  |  26 Julio 2018

No es casualidad que David Broncano lleve cetro, capa y corona en la intro de 'La Resistencia'. En 2018 el cómico se ha coronado definitivamente como el rey de los millennials, quienes no dudan en imitar su particular voz y hacer uso de sus mejores frases. Más complejo es explicar el porqué de su éxito. Con Broncano nos reímos y lo pasamos bien, pero no sabemos qué tiene para mantenernos enganchados a sus programas diarios.

En MENzig vamos a intentar resolverlo. Y avisamos de que es algo difícil, porque estamos analizando a una persona que estudió una carrera de Publicidad y a su vez se matriculó en algunas asignaturas de Física por gusto. No terminó trabajando ni de una cosa ni de otra, pues las habituales ocurrencias con las que hacía reír a sus amigos de Ocera (Jaén) le llevaron a enviar un monólogo a Paramount Comedy, canal que le acogió en 'Nuevos cómicos' en 2008.

Colaborador en numerosos programas de televisión desde entonces, fue en la radio donde ha gestado su popularidad. Tras un breve paso por 'No somos nadie', de M80, comenzó a participar de forma puntual en la Cadena SER, primero en 'Hoy por Hoy' y más tarde en 'A vivir que son dos días', donde todavía continúa. Y todavía le quedaba tiempo para presentarse al King Gong Show de Londres, todo un reto para los cómicos donde te obligan a bajarte del escenario en cuanto dejas de hacer gracia. Broncano quedó finalista hablando en inglés.

Punto de inflexión

En verano de 2014, sus secciones en la SER y su papel de copresentador en 'Yu: no te pierdas nada' le valieron un puesto en un nuevo programa cuya única función iba a ser rellenar las horas muertas del verano: 'La Vida Moderna'. El rey comenzaba su ascenso al trono.

Los programas sueltos veraniegos se convirtieron en sección semanal integrada dentro de 'Oh! My LOL', un conglomerado de espacios humorísticos creado por la Cadena SER en 2015 para reducir el tiempo del histórico 'Hablar por hablar', mermado en niveles de audiencia. Broncano, junto a Ignatius Farray y Quequé, se hicieron con un hueco los lunes de 1:30 a 2:00 de la mañana.

No desaprovecharían la oportunidad. 'La vida moderna' pasó a emitirse en 2016 de lunes a jueves, y su salto a YouTube, donde se pueden ver todos los programas al día siguiente, catapultó al espacio y convirtió a Broncano en uno de los cómicos más influyentes del panorama actual

En la sencillez se encuentra la fórmula del éxito. Broncano lidera un programa en el que no hay apenas guion, solo un par de hojas de Word habitualmente maltratadas por los colaboradores. Se deja todo a la improvisación. Existen secciones que articulan la más de media hora que dura el espacio, pero la sensación es que nunca sabes lo que va a pasar. El público que abarrota cada día el estudio de la SER acude con la esperanza de presenciar algo diferente que les sorprenda, como si de un espectáculo de magia se tratara. Siempre lo consiguen.

Una forma atrevida de afrontar la realidad

Durante todos estos años, el cómico gallego que creció en Jaén ha modificado su humor. Con un contenido más negro y polémico en sus inicios, ha sabido mantener su estilo adaptándose al público general. En 'La vida moderna' es el pegamento entre el humor bizarro de Ignatius y el ácido de Quequé. Su capacidad para sacar 'commedia' de cualquier situación ha cautivado al público joven en un momento en el que quizás exista menos margen para el ingenio políticamente incorrecto.

En este aspecto radica otro de los grandes puntos de Broncano. No tiene miedo de bromear con nada ni con nadie. Política, Valle de los Caídos, muertes o enfermedades, todo entra en su abanico de posibilidades. De momento se ha librado de una citación de la Audiencia Nacional, como él mismo comenta a menudo. No podemos asegurar que nunca le vaya a tocar.

Sin embargo, no lanza sus hirientes comentarios así porque sí. Broncano pertenece a una nueva generación de millennials que, conscientes de todos los problemas que hay en la sociedad, deciden afrontarlos de forma diferente, en este caso mediante la sátira constante. El cómico pasa por encima de ellos sin profundizar ni mostrar una ideología concreta. No exhibirá el compromiso social que puede tener Andreu Buenafuente, ni le interesa hacerlo. Su mayor ataque es, precisamente, que dichos asuntos tengan cabida en su espacio, donde puede despedazarlos a su antojo.

Broncano se "resiste" a abandonarnos

La facilidad de David para presentar programas con total normalidad, como si fuera sencillo, le abrió las puertas a Movistar, que apostó firmemente en su canal propio por la comedia. Tras participar en 'Late Motiv' y presentar 'Loco Mundo', Broncano se ha convertido definitivamente en un fenómeno de masas con 'La Resistencia'.

La fórmula empleada es la misma que en 'La vida moderna': crear un programa que no deje indiferente a nadie. En radio puede ser más común, pero en televisión encontrar esto es misión imposible. No hay nada similar a 'La Resistencia' en antena, y eso que su modelo es común, basado en un monólogo, algunas secciones sueltas y una entrevista.

Aunque aquí cuenta con menor libertad que en su programa de radio debido al marcaje al hombre que le hace el director, Ricardo Castella, Broncano consigue en su late night esa sensación de caos que tanto gusta de él, en la que no hay nada preestablecido. Este hecho se agudiza en las entrevistas, que nos han permitido comprobar la versatilidad del cómico. Porque en su primera temporada en 'la Resistencia' ha tenido que hacer frente a todo, desde una entrevista en inglés en la que él mismo tenía que traducir el particular humor británico de Andrew O'Neill (aquí no hay dinero para un traductor personalizado como en su idolatrado 'El Hormiguero') a tener que frenar a Yung Beef y su amigo mientras se hacían unos porros en el sofá de invitados. Por no hablar de la química con Ingrid García-Jonsson, una de las pocas personas que consiguen poner nervioso al cómico.

A pesar de afrontar caóticas situaciones, en las que lo único fijo era la ya clásica pregunta "¿Cuánto dinero tienes?", Broncano ha logrado solventar cada entrevista y hacerla lo más amena posible. El resultado, una hora diaria de puro entretenimiento que le ha impulsado a la cima en 2018. Ahora es él el entrevistado en muchos programas (incluido 'El Hormiguero', cumpliendo así su sueño). Los 50 minutos que pasó en 'Seis mujeres sin piedad' de Intereconomía son ya historia de esta generación millennial a la que abandera.

En septiembre volverá a la carga con una nueva temporada de 'La Vida Moderna' y 'La Resistencia', además de sus colaboraciones habituales en otros espacios y la gira 'La Vida Moderna: Live Show'. David Broncano está en todas partes, pero no nos cansamos de él, y esa es su gran baza. El rey ha venido para quedarse.

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