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La relación entre fútbol y tabaco ha sido siempre tan estrecha que se puede hacer un 11 profesional con fumadores
Desde Alfredo Di Stefano hasta Ronaldinho, una gran lista de jugadores fumadores confirman que el fútbol no es un deporte tan sano como parece. En este artículo recogemos un 11 de garantías con los futbolistas que abrazaron el tabaco.
| 23 Enero 2019
Episodios de futbolistas probando cosas que no deberían suceden siempre, otra cosa es que nos enteremos, como terminó ocurriendo con los jugadores del Arsenal, que fueron pillados consumiendo el gas de la risa en agosto de 2018. Sucesos como este nos recuerdan que los jugadores profesionales son jóvenes y también quieren vivir la vida. Aunque engancharse al tabaco no es la mejor forma de hacerlo, muchos grandes futbolistas han caído en el vicio más común. A continuación os mostramos algunos de ellos.
1 Alfredo Di Stefano, el fumador elegante
El mundo del deporte suele ir acompañado de una vida sana. En concreto, en la esfera futbolística se ha alcanzado un nivel de profesionalidad tal, que un simple cigarro puede ser la diferencia que desnivele la balanza a favor del otro equipo. Pero no siempre fue así. Hubo tiempos en los que las estrellas del fútbol anunciaban las cajetillas que consumían. Fue el caso de 'La Saeta Rubia', Alfredo Di Stéfano. Por suerte para él, en aquella época no era la resistencia física lo que desequilibraba la balanza, sino la clase en el terreno de juego. Y ahí no había quien superase al hispano-argentino.
2Johan Cruyff, fumador compulsivo de jugador y consumidor de Chupa Chups como entrenador
Reinventar la manera en la que se practicaba el futbol no era un trabajo simple. Johan Cruyff, la estrella del Ajax, el genio que catapultó al Barcelona al éxito, una mente privilegiada para la estrategia, se fumaba dos cigarros en los descansos cuando era jugador. Durante su etapa de entrenador, todo el mundo le vio fumar en el banquillo y el mismo número de personas le vio intentar dejarlo a base de Chupa Chups. A Johan le gustaba la frase "Trabajo bien hecho, cigarrillo para el pecho" y, por suerte o desgracia, siempre trabajaba bien.
3 Diego Armando Maradona, el rey en lo suyo
Maradona, el 'Pelusa', el 'Barrilete Cósmico', el jugador con más carisma de la historia del fútbol, firmó inolvidables actuaciones a lo largo de su carrera en todos sus equipos y en la selección argentina. Sin embargo, su impresionante zurda es igual de recordada que sus extralimitaciones fuera de los terrenos de juego.
Maradona ha vivido su vida a su manera, siempre. No se ha querido ocultar. Más allá de sus adicciones a la cocaína que todos conocemos, el bueno de Diego Armando es probablemente es el mejor fumador de puros de la historia del deporte rey.
4 Ronaldo Nazario, el 'activista antitabaco'
Otro que tampoco era bueno (nótese la ironía). Ronaldo revolucionó el escenario futbolístico español tras su llegada al Barcelona y más aún con su fuga al Madrid. Fue, con disferencia, el mejor delantero del mundo en el uno contra uno. No había nadie como él a la hora de regatear al portero, técnica que le vino bien para zafarse de los paparazzis, hasta el punto de mantener en secreto que el '9' fumó hasta su época de decadencia y sobrepeso. Ahora ya no se esconde. Además, hace de sobra honor a su apodo, 'Fenómeno'. Hace campaña antitabaco y luego fuma en público. Un referente.
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5 Zinedine Zidane, unas caladas antes de humillar la pentacampeona
No era un fumador social. Nadie sabía que le gustaba 'darle al pito', pero, cosas del destino, la esfera pública se enteró justo antes de la Semifinal del Mundial 2006. Ese día Zidane desayunó en el hotel junto al equipo técnico, alguien le ofreció un cigarro y el astro francoargelino no quiso rechazarlo. No sabemos si se acabó el cigarrillo, lo que sí sabemos es que esa misma tarde, Zizou escribió una de las páginas de oro de la historia de los mundiales.
6 Roberto Carlos, 'The Fastest Shot'
Parece que Ronaldo es una mala influencia, porque cada vez que vemos a los dos galácticos brasileños juntos, ambos pecan y caen en el vicio. No es cuestión de enfadar a Roberto Carlos, que sabemos que tiene un humor especial, pero lo que hicieron en el partido de leyendas amistoso contra Dinamarca el pasado verano está feo. Fumar en un vestuario puede considerarse una falta de respeto, pero ¿fumar en un descanso? Eso es ir de sobrado. Salvo que seas Cruyff, claro.
7 Rolandinho, el comandante del FC Barcelona
Muchos piensan que Ronaldinho es el mejor jugador de la historia porque salía de fiesta la noche anterior a un partido y conseguía meter dos goles. Pero lo que pocos saben es que, el mago Gaucho, disfrutaba fumando puros tras un buen partido. Si esta información es cierta, Ronaldinho tiene que tener los pulmones más negros del fútbol profesional, porque en sus buenos años no tenía partido malo.
8 Mesut Özil, un descuido durante las vacaciones lo tiene cualquiera
Con la cara de bueno que tiene, ¿quién lo iba a decir? Mesut brilló con luz propia durante el mundial 2010 de Sudáfrica y un año después hizo lo propio en todas las revistas deportivas de Europa, ya que había sido fotografiado fumando. Hay que decir en favor del alemán, que fue uno de sus colegas quien le dio el cigarro, pero eso no es excusa. En esos casos hay que recordar lo que te decía nuestra madre: "Siempre di que no"
9 Gerard Piqué, el capo de la cúpula futbolística
De la misma forma que Ronaldinho, a Gerard también le gusta disfrutar de un buen Cohiba después de una victoria importante. Piqué tiene una relación complicada con los periodistas, así que, antes de esperar la filtración de una imagen suya fumando, él mismo subió una foto a Twitter. En ella, aparece con el trofeo de la Champions y un pedazo de puro enorme entre los dientes.
10 Carlo Ancelotti, una ceja inolvidable Hablar de que del histórico Milán de Sacchi tanto él como Rijkaard fumabanLo más nuevo
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El histórico Milán de Arrigo Sacchi se convirtió en uno de los mejores equipos de la historia del fútbol. Lo que no todo el mundo sabe es que en esa 'squadra' compartieron vestuario dos jugadores (y más tarde entrenadores) de talla mundial: Carlo Ancelotti y Frank Rijkaard. Lo que desconoce la mayoría es que ambos tienen otra cosa en común: su adicción al tabaco.
Centrándonos en Carletto, probablemente, el italiano sea el entrenador que más sufrió tras la decisión de prohibirse fumar en el área técnica allá por 2004. Se rumorea por Madrid, que cuando visitaba alguna obra de teatro o un espectáculo por la capital de España no podía aguantar ni al descanso para salir a la misma calle a fumar. Todo un fumador empedernido, ganador de 3 Champions como entrenador, que no podía quedarse sin su mención especial.
11 Dani Benítez, la gran promesa que tuvo que pisar el freno
El caso de este jugador es perfecto para terminar el artículo y darse cuenta que no vale todo en el fútbol. Dani Benítez empezó como lateral izquierdo en un recién ascendido Granada, cuando todos los equipos del país seguían su pista.
Deslumbró tanto con su explosividad, manejo y actitud descarada que parecía que su salto a un grande era cuestión de tiempo. Hasta que el 16 de febrero de 2014, tuvo que pasar por el test anti-dopaje tras un partido y dio positivo en cocaína. La sanción, de dos años, era la gota que colmaba el vaso en su polémico historial, cuando aún se recordaban sus dos meses de castigo por arrojar una botella al árbitro Clos Gómez y sus polémicas fotos con dos plantas de marihuana, motivo por el cual le incluimos en esta lista.
Tras el último escándalo, su imagen se vio muy perjudicada y acabó recalando en Chipre después de un periplo por la 2ªB española. Es el mejor ejemplo de un jugador con ascendencia meteórica que ve truncada su carrera por ser un 'cabra loca'.
En líneas generales se puede decir que la relación entre futbol y tabaco no es buena. También se puede confirmar que una gran parte de los futbolistas fuman, beben e incluso coquetean con ciertos tipos de drogas. Johan Cruyff murió por cáncer de pulmón cuando todavía tenía mucho que regalar a los aficionados. Si no hubiera fumado compulsivamente , seguramente seguiría entre nosotros. También Sócrates, uno de los mejores futbolistas de la historia, falleció a la pronta edad de 57 años a causa de un fallo multiórganico provocado por años de alcoholismo y adicción al tabaco.
El tabaco mata. Tú haz caso a Ronaldo Nazario (ejem) y no fumes.