Taifa Yallah: Dellafuente se pasa al rock y consigue sorprendernos una vez más

Dellafuente

Taifa Yallah: el nuevo proyecto de Dellafuente donde se lanza de lleno al rock

Dellafuente nos ha dejado a todos con la boca abierta con Taifa Yallah, donde el granadino da rienda suelta a su potente imaginario con un álbum con claras referencias... al rock andaluz.

Por Juan Ángel Asensio  |  22 Enero 2020

Después de realizar una compra superior a 100 euros, una tienda de ropa regaló a un joven granadino la oportunidad de grabar su primera canción. Así comenzó, de casualidad, como casi todas las grandes historias, la carrera de Dellafuente. Poco después, en una ascensión meteórica, se haría un hueco en la, todavía en pañales, escena de música urbana de nuestro país, gracias a temas como 'Diamantes', con Maka, o 'Consentía'. Ya desde sus inicios parecía evidente que vDellafuente no era uno más del montón, otro artista engordando la larga lista de traperos y raperos españoles. En sus canciones siempre había pureza y atrevimiento respecto a lo formal, sin olvidarse de representar a su ciudad y a grandes referentes de la cultura andaluza, como el propio Federico García Lorca o Camarón, entre muchos otros.

Dellafuente ha dejado muy claro en todo momento que los pasos que da no son por azar o impulsividad, sino que están medidos al milímetro y que detrás de ellos hay un concepto bien definido. El claro ejemplo de eso son sus dos discos: 'Azulejos de corales' y 'Ansia viva'. Sería con este último donde el músico granadino comenzaría a juguetear con los instrumentos analógicos, rodeándose de grandes músicos como Antonio Narváez o Moneo. Ejemplo de ello también son sus directos en Vevo o su, también en directo, junto alguien de la talla de Raimundo Amador, componente de los legendarios Pata Negra o sus colaboraciones con Novedades Carminha. Fueron estos últimos los que dijeron: ''Chino hazte rockero, estás perdiendo dinero''. Lo que nadie se esperaba es que Dellafuente se lo fuera a tomar tan al pie de la letra.

Y de repente apareció Taifa Yallah

El 20 de enero de 2020 (¿casualidad lo redondo de la fecha elegida?) Dellafuente saca 'EP.01-Causa', el que, a juzgar por su título, es solo el primer episodio de este nuevo proyecto del granadino bajo el nombre de 'Taifa Yallah'. El trabajo ha estado precedido por unos cuidados audiovisuales acompañados de versos el poeta persa Omar Jayam, que ya nos daban una idea de que camino tomaría esta obra, plagada de símbolos que nos remiten al pasado conjunto de Andalucía y la cultura islámica.

Este imaginario se hace aún más palpable si tenemos en cuenta los gifs (tal y como solía hacer Dellafuente en sus comienzos) que sirven de clip en Youtube para todos los temas del disco. En ellos podemos ver una reinterpretación o una actualización de varios motivos andalusíes, como por ejemplo una media luna que, en esta ocasión, aparece boca arriba junto a una cruz cristiana. Lo mismo sucede con las vestimentas (donde se unen tradición y streetwear) de los personajes, los cuales aparecen cargando estandartes o montados a caballo, uno de los símbolos más frecuentes de la poesía árabe, como es el caso del anteriormente citado Omar Jayam. Una estética cuidadísima en la que Taifa Yallah no deja nada al azar, haciéndonos saber que nos encontramos en frente de algo totalmente conceptual.

Y es que más allá de lo cohesionado que este la parte visual, el contenido persigue también ese mismo concepto. En el apartado lírico está más que claro, con unos textos que beben de la extensa y rica tradición poética del sur de nuestro país, llenos de referencias e imágenes que nos remiten constantemente a la misma. Pero sucede lo mismo en el plano musical: pronto advertimos que Dellafuente y su equipo de músicos han tenido como norte al rock andaluz de los años de la década de los setenta, con grupos como Triana, Alameda o, incluso, a aquel majestuoso 'Omega', una de las obras cumbre de nuestra música, facturada por el maestro Enrique Morente y el grupo granadino de rock alternativo Lagartija Nick.

El trabajo arranca con una intro totalmente instrumental a cargo de una guitarra eléctrica que, en cierta forma, recuerda al sitar de la 'Nana del caballo grande' de Camarón. Acto seguido aparece 'La verdad', el segundo corte del álbum. Esta canción comienza con una guitarra eléctrica llena de reverberación. No es, sin embargo, hasta el estribillo donde el tema muestra su verdadera cara gracias a un muro de guitarras distorsionadas y un coro flamenco que nos hace recordar a lo mejor del rock andaluz.

La tercera pista de este 'EP.01-Causa' lleva por nombre 'Corazón de agua'. En este tema ya podemos corroborar que las guitarras van a ser la tónica general del álbum y eso nos encanta. Como siempre, Dellafuente nos deja un texto maravilloso, perfilado a la perfección, con perlas como esta: "Ahora llegas, me entregas un corazón de agua / y te sorprende el tacto, reseco de mi espalda / y descubres, tu piel como si fuera un yermo / desnuda ante un desierto / se rompe el amor como un recibo viejo / y de golpe, comprendes dudas milenarias / los suspiros de la rabia / te dibujan nuevos colores en un papel".

El comienzo de la cuarta canción, 'El Bosque', puede descolocarnos. Cuando inicia su arpeggio sentimos que nos suena a algo conocido, y cuando aparece el riff de guitarra principal lo tenemos claro: Extremoduro. Y es que, instrumentalmente, el comienzo de 'El Bosque' podría estar sacado de 'La Ley Innata'. Después esta sensación se desvanece y regresamos a la senda del rock andaluz.

Con '400 Demonios' alcanzamos el ecuador de este trabajo. Se trata sin duda del tema más oscuro del álbum, una oscuridad que alcanza su cenit cuando Taifa Yallah comienza a repetir, como un mantra, nombres de demonios bíblicos: Astaroth, Azazel, Balaam y Behemoth.

'El Barco' comienza con un piano cuya melodía, formada por acordes menores, transmite cierta tristeza amarga. Esta tristeza pronto se convertirá en rabia, después de la aparición de batería y guitarras en el estribillo. Los continuos cambios de ritmo son la seña de identidad de esta canción.

A punto ya de acabar 'EP.01-Causa', aparece 'Yallah', quizá el tema que mejor resume el concepto que Dellafuente ha querido imprimir a este trabajo. Es aquí donde el granadino abraza con mayor cercanía a Taifa Yallah.

Y terminamos con 'Causa', una canción inmejorable para cerrar un disco que ha sido toda una montaña rusa de emociones e imágenes que aún tardaremos en asimilar como se merece.

No hay mejor forma de resumir 'EP.01-Causa' que con estas palabras de Dellafuente: "Taifa Yallah es poder. Autoconquista. Espiritualidad. Desaparición de complejos. La eterna búsqueda de un propósito. Taifa Yallah no puede coexistir con la incertidumbre del qué dirán. La experiencia, el conocimiento, los medios, han podido hacerlo realidad. Donde desemboca la inquietud. Donde desembocan los miedos. Taifa Yallah es liberación".

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