Foyone lanza 'Presidente', un álbum (y película) que no dejará indiferente a nadie

'Presidente': el álbum (y película) de Foyone que no te dejará indiferente

El malagueño Foyone saca 'Presidente', un álbum rotundo acompañado de una película en plano secuencia que a muchos políticos de nuestro país no les gustará.

Por Juan Ángel Asensio  |  03 Febrero 2020

Foyone llevaba ya varios años diciendo que para el año 2020 iba a ser presidente. No sabíamos si hablaba en serio o no cuando decía esto, si de verdad el malagueño se iba a presentar a las elecciones de nuestro país como candidato a través de un partido político. Sin embargo, ha cumplido su promesa, aunque de otra manera. Antes de que acabe el primer mes de 2020, la fecha señalada, Foyone ha sacado 'Presidente'. Aun así, y eso me consta, muchos siguen esperando su candidatura política. Pero de momento tendrán que conformarse con el disco (discazo) que acaba de lanzar. Vamos a analizarlo.

Un viaje en limusina por la mente del presidente

Lo normal cuando un artista saca a la luz un nuevo álbum es que muestre un par de singles con videoclip antes para abrir boca. Sin embargo, Foyone no ha querido quedarse ahí, y ha llevado su parte audiovisual un poco más allá: junto al disco ha lanzado una película rodada en un aparente plano secuencia, en la que seguimos durante una jornada a su personaje, un personaje que ya conocíamos de antes: el Presidente, lleno de matices y actitudes que fácilmente podremos reconocer en otros políticos españoles.

Desde siempre, Foyone ha demostrado un gran interés por lo audiovisual. Como ejemplo nos puede servir aquel videojuego que sirvió de acompañante para una mixtape. No obstante, para 'Presidente', el MC malagueño ha decidido apostar el todo por el todo.

Nuestro viaje comienza con un plano del interior de una limusina vacía, sin contar al conductor. De repente los bombos y las cajas comienzan a sonar, y entre frases como "la política es mentira", Foyone, nuestro presidente, aparece, ataviado de la misma manera que en los clips que sirvieron de presentación para este trabajo, un impoluto traje negro y una corbata amarilla a rayas.

A lo largo del resto de la 'película' vemos cómo nuestro presidente pasa por diversas situaciones, que van desde cerrar tratos (no siempre de por los métodos legales, o eso parece), hasta leer informes, fumar puros, firmar contratos, tomar unas copas, brindar con policías corruptos e incluso jugar a la consola. Después de un atareado día, cae rendido ante los pies del sueño en el interior de su limusina.

La presentación es toda una declaración de intenciones por parte de Foyone. Nos deja claro que viene a poner los puntos sobre las íes. Sin embargo, según se suceden los temas vemos que no todo el discurso de 'Presidente' se basa en la política. Más bien podemos decir que nos adentramos hasta las profundidades de la psique de Foyone como nunca antes lo habíamos hecho. 'Presidente' es, fundamentalmente, un disco donde la locura y las enfermedades mentales son el eje central sin discusión. Igual que lo son sus causas, sus motivos, sus inseguridades y miedos (tanto sociales como personales) como la realidad paternal en la casa de su infancia, los episodios delictivos necesarios para poder salir hacia adelante, las drogas psicodélicas, y un larguísimo etcétera.

Foyone ha sido, desde sus comienzos, un artista cuya característica principal es no guardarse nada. Ha sido, digamos, confesional, visceral, pero nunca antes habíamos dando rienda suelta a su subconsciente hasta esa colección de canciones. El malagueño crea un retrato perfecto, tema a tema, de su psique o, no sabemos muy bien, la del presidente. En cualquiera de los dos casos, supone una radiografía exhaustiva en la que cualquiera de nosotros se podrá ver reflejado, de la mano de un Foyone desenfrenado, desbocado, sin ningún tipo de tapujos, siempre fiel a su estilo seco y compacto, y al sonido granítico esculpido por sus ya habituales Manu Beats y Sceno.

Desde ya, 'Presidente' entra con honores en el Hall of Fame del rap patrio, formando un enorme lienzo donde se aglomeran todas las pinceladas que Foyone nos había mostrado durante su ya larga carrera. Hasta el momento, supone la cima creativa del artista malagueño, que no lleva solamente su música a otro lugar, gracias a un concepto poderoso y muy simbólico, sino también sus pretensiones audiovisuales, llevando a cabo una hazaña que ningún otro rapero de nuestro país habría, siquiera, imaginado. En definitiva, tenemos un nuevo presidente.

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