McDonald's y su Big Mac se suman a la lista de los juicios por patentes más sonados

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McDonald's pierde al Big Mac como marca registrada, y aun así no es la empresa peor parada tras un juicio por patentes

La batalla legal que han protagonizado McDonald's y Supermac's ya es uno de los litigios históricos por patentes debido a su sorprendente sentencia. Aun así no es el fallo más agresivo que se conoce después de un juicio de este tipo. En este artículo reunimos los más destacables.

Por Víctor Manuel Gil  |  21 Enero 2019

La cadena de restaurantes McDonald's ha perdido el derecho sobre la patente de la legendaria hamburguesa Big Mac dentro de la Unión Europea. El litigio en el que estaban embarcados la gran multinacional y la franquicia de comida rápida Supermac's ha sido resuelto dando la razón a la empresa irlandesa.

Un nombre que lleva a la confusión

Cuando Supermac's intentó expandir su negocio por Reino Unido y algún que otro país europeo, allá por 2015, McDonald's salió a su paso para intentar dilatar en el tiempo la llegada de un nuevo competidor. La forma de evitar una pronta puesta en escena de la franquicia irlandesa fue denunciando un posible plagio en la marca. Según McDonald's, el nombre de su rival (Supermac's) podía llevar a la confusión entre los clientes, ya que guarda cierta similitud con el título de su hamburguesa principal, el Big Mac. Un argumento un tanto endeble, porque dentro del menú de Supermac's no se encuentra ningún producto con el nombre de Big Mac, solo una hamburguesa triple que se llama Mighty Mac.

La Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO) sentenció tras estudiar el caso que Supermac's llevaba razón y que McDonald's no solo no había caído en plagio, sino que no había demostrado el uso genuino de la marca durante los 5 años anteriores al juicio celebrado en 2017. Por lo tanto revocó a McDonald's los derechos de registro de la marca Big Mac, permitiendo así la expansión de Supermac's y también dando la posibilidad de utilizar el nombre de Big Mac en cualquier producto que venda tanto los irlandeses como cualquier otro restaurante. A Ronald McDonald no le salió bien la jugada que digamos.

A la izquierda, un Big Mac clásico. A la derecha, un Mighty Mac.
A la izquierda, un Big Mac clásico. A la derecha, un Mighty Mac. Shutterstock

No obstante, puede que el payaso vuelva a sonreír en poco tiempo. McDonald's va a recurrir la sentencia. De todos modos, este golpe viene en un mal momento, porque las ventas del Big Mac han descendido drásticamente en los últimos años. Los productos especiales no consiguen cuajar en la clientela y la expansión de otras franquicias de comida rápida están consiguiendo apartar a la hasta ahora fiel clientela.

Con esta sentencia de la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea, se revoca una marca registrada que se concedió hace 22 años. Es el valiente epitafio de una hamburguesa que ha marcado a toda una generación. Simplemente, la historia de la gran multinacional está ligada totalmente a su producto estrella. El Big Mac es mucho más que un simple menú de comida rápida, gracias a esta hamburguesa se levantó un imperio que ha llegado hasta el último rincón del mundo.

El secreto del Big Mac

Doble hamburguesa, con tres panes y como parte más importante, una salsa secreta que todavía sigue siendo lo que empuja al público a entrar al restaurante. De la misma forma que llamamos Coca-Cola a los refrescos de cola, a este tipo de hamburguesa se le llama coloquialmente Big Mac, por su genuina forma y sabor. Pero su mayor secreto no es la fórmula de su salsa especial, ya que, 44 años después de su estreno, los seguidores más fieles ya han descubierto cómo aproximarse a su sabor. Lo que McDonald's no quiere que se difunda es que la propia empresa también imitó (por no decir que plagió) el diseño de su producto estrella de otro restaurante llamado Big Boy.

Bob's Big Boy fue el restaurante precursor de las hamburguesas tal y como las conocemos hoy en día: anchas, altas y con muchos ingredientes. McDonald's 'se inspiró' en las hamburguesas de Big Boy para crear el Big Mac que todos conocemos. Quién sabe, puede que este hecho haya influido en la decisión final de los jueces o que sea simple justicia divina.

Ronald McDonald, extinta mascota del restaurante
Ronald McDonald, extinta mascota del restaurante Shutterstock

Una hamburguesa en crisis

Las ventas del Big Mac han caído en picado durante los últimos años, evidenciando una situación de desesperación y falta de ideas para volver a alzar su producto estrella. Campañas de promoción sin mucho éxito como el Big Mac XXL o el Big Mac gratis con la compra de otro producto dan fe de la mala situación por la que pasan. Lo peor para McDonald's es que el Big Mac sigue siendo un bastión fundamental en el reconocimiento de la marca. Solo hay que ver que cuando las ventas del producto descienden, automáticamente se producen pérdidas notables.

Cuando las ventas del Big Mac disminuyen, McDonald's sufre pérdidas
Cuando las ventas del Big Mac disminuyen, McDonald's sufre pérdidas Shutterstock

Juicios de patentes que dejaron unas sentencias de escándalo

En los últimos años, con la evolución de la globalización, se han aumentado los juicios internacionales por patentes. Los choques de gigantes económicos en las cúpulas judiciales suelen provocar mucho ruido y los medios se hacen eco de esta disputas, aunque muchas veces no tienen la suficiente publicidad por tratarse de empresas que pueden ver manchada su imagen. A continuación exponemos varios juicios históricos sobre patentes en los últimos años.

Vodafone no sabe guardar secretos, supuestamente

Este juicio es de esos que mueven tanto dinero que abruman: puede haber hasta 500 millones de euros en indemnizaciones por violación de patente.

Vodafone es la empresa de telecomunicaciones con más beneficios de España
Vodafone es la empresa de telecomunicaciones con más beneficios de España Shutterstock

Cuando una empresa relativamente pequeña como Top Optimized Technologies (ToT) hace negocios con gigantes como Vodafone puede salir mal parada. Esta historia comenzó cuando la empresa de telecomunicaciones quería mejorar la eficiencia del espectro 3G y contrató los servicios de ToT. La startup española ya había patentado una serie de mejoras en 2002 y aceptó el acuerdo con la empresa inglesa. Poco después, Huawei empezó a trabajar con Vodafone. La compañía china ofreció entonces crear una alternativa a la propuesta de ToT supuestamente de forma gratuita, así que, con la excusa de que no había cambios considerables en su servicio, rompieron el acuerdo con ToT y apostaron por el fabricante de móviles asiático.

El director de ToT, Álvaro Lopez Medrano, encontró indicios de plagio en la alternativa presentada por Huawei, y no dudó en demandarlos. Desde entonces, el litigio se está dilatando en el tiempo, sumando interés y gastos judiciales. Podría ser una sentencia histórica por las cifras que se están manejando.

New Balance vs New Boom

Este conflicto tuvo lugar en China, donde New Balance posee el 1% del mercado de ropa deportiva. Marcas superiores como Nike o Adidas se mueven en un 7%, pero cualquier cifra mayor a cero en este mercado es un negocio de miles de millones. New Boom, una marca de zapatillas y artículos deportivos, presentó su nueva imagen y recordaba de forma clara al logotipo de New Balance. Aparte de la similitud entre las iniciales, tanto el color como el diseño de las zapatillas eran más propios de New Balance que de otra marca.

New Balance y su hermano gemelo New Boom
New Balance y su hermano gemelo New Boom HypeBeast

La sentencia favorable a New Balance obligaba a la compañía china a indemnizar a la multinacional deportiva con 1.500 millones de dólares. Un castigo ejemplar para afirmar la imagen de una China más comprometida con las patentes tal y como prometió el presidente Xi Jinping.

Adidas demanda, Adidas plagia

Adidas es una de las multinacionales más importantes de Alemania. Adolf Dassler fue el creador de un imperio que a día de hoy está curtido en mil batallas legales por patentes. Y es que de la misma forma que Adidas demanda, también es demandada. Estos son 3 casos que sirven de ejemplo:

  • Under Armour plagia una app para smartphones. Adidas demandó a la empresa estadounidense por plagiar hasta 10 patentes de tecnología móvil. Este caso fue realmente sonado porque uno de los ingenieros que desarrolló la app fue poco antes responsable de innovación y desarrollo en Adidas, lo que le permitió acceder a información privilegiada y confidencial.
  • Las míticas botas 'Predator' nacieron fruto de la copia. Lászlo Orosz, ex jugador húngaro y entrenador de fútbol, diseñó unas botas que se popularizaron y terminarían usando miles de futbolistas, conocidas como 'Alpha'. Diez años después, en 2002, la multinacional alemana Adidas puso a la venta sus nuevos modelos 'Predator Precisión' y 'Predator Manía'. El autor húngaro los demandó por violación de patente. 12 años después la justicia dio la razón a Lászlo y Adidas tuvo que pagar 60 millones al entrenador.
  • La historia se repite, esta vez con Asics. Adidas ganó en 2017 un juicio contra Asics en EEUU. Por lo visto la aplicación móvil My Asics utilizaba sistemas patentados por la empresa alemana y desarrollados por Fitnesskeeper, una plataforma innovadora en el mundo del running y las app de salud y deporte
Adidas, multinacional puntera en artículos y ropa deportiva
Adidas, multinacional puntera en artículos y ropa deportiva Shutterstock

Samsung vs Apple, siete largos años de juicio

Si hay un duelo entre colosos de la economía mundial es el que protagonizaron Samsung y Apple desde 2011 hasta 2018. En el Olimpo empresarial todavía retumban los golpes que estos dos gigantes se propinaron durante la lucha.

Apple vs Samsung, una batalla en lo más alto
Apple vs Samsung, una batalla en lo más alto Shutterstock

Esta bonita historia de 'amor' comenzó cuando Apple descubrió posibles indicios de plagio en el diseño de la tecnología móvil de Samsung. El litigio duró 7 largos años hasta que la primera sentencia fue publicada. El juzgado estadounidense de California dictaminó que, solo en concepto de daños, la empresa surcoreana debía indemnizar a los fabricantes del iPhone con 539 millones de euros. Tras varios recursos y apelaciones esta fue la sentencia definitiva, y Samsung tuvo que desembolsar esa suma de dinero. A pesar de ello, Apple no quedó del todo conforme. Ellos querían que su rival les pagara la cifra total de beneficios que habían obtenido gracias a los productos basados en los dispositivos Apple. Nunca llueve a gusto de todos.

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